Soy un Nómada. Mis únicas Banderas son el cielo del día y el manto de estrellas en la noche. Mi Tierra está allí donde piso. Mi cultura es la que comparto e intercambio con las personas que encuentro en el camino. Mi himno es el canto de los pájaros, el susurro de los arroyos cristalinos y el bufido del viento en bosques y cumbres. Mi gente sois tod@s, aunque todavía no os conozca.

martes, 23 de agosto de 2011

Vignemale por la Moscowa


Acabamos de llegar a San Nicolás de Bujaruelo. Mi compi y yo hemos preparado las mochilas con toda la atención del mundo puesta en su peso...hay algo que podamos dejar?... Valorando la ruta, dejamos finalmente algunos hierros, arneses, los piolets, ropa de recambio... Las cosas "innecesarias" se van a quedar atrás...porque nos espera una buena, y aun así las mochilas son un lastre...
  • Y el hornillo??? ... debo haber olvidado el hornillo!!! - exclamo sorprendido.
  • Bueno...no pasa nada...mira, menos peso! Jajaja – es lo que responde mi compi siempre buscando el punto positivo.
Tras valorar los víveres que podremos llevar sin cocinar, creemos que tendremos suficiente. Nos colgamos las mochilas y remontamos el Valle del Ara desde el puente de Bujaruelo. Tardamos menos de dos horas en llegar a la Cabaña de Labaza y todavía tenemos una hora escasa de luz solar... Así que tras parar un momento seguimos la marcha y ascendemos por la derecha del Torrente de Labaza ganando altura. El plan: intentar el Vignemale y dos tresmiles más subiendo por el corredor de la Moskowa.

La pendiente es muy pronunciada, y cuando nos alcanza la noche estamos sólo a unos 2100 m de altura. El sendero es difícil de seguir, sólo hay algunos hitos y muchas veces cuesta encontrarlos. Paramos para cenar cerca de una roca que se levanta plana sobre la ladera. Una cena fría, iluminados por los frontales y los truenos de la tormenta que se acerca. La noche es muy oscura, ya que la Luna no ha aparecido y las nubes abosorben toda la luz. Después continuamos subiendo, con ciertas dificultades.


Estamos a 2300 (aprox) cuando encontramos un sector de grandes rocas...un farallón de unos 20 m de ancho que ofrece una mínima posibilidad de vivac muy precario...pero la lluvia comienza y según las reseñas no encontraremos sitios mejores hasta mucho más arriba. Hemos arañado 500m de desnivel a la Cabaña... y eso nos anima mientras nos metemos en nuestros sacos y fundas de vivac. Son casi las 12 de la noche. Mañana solo tendremos 1000 m. más de desnivel...
  • Te invitaré a comer en Baysellance – me promete mi compi. Las raciones de altura que nos quedan no serán suficientes para retornar al punto de inicio...eso nos queda claro.
La tormenta será breve y el cielo se aclara. Las fundas nos protegen a la perfección...pero la corta noche se hace larga por la incomodidad. A través de la visera de mi funda observo en entrevela la silueta cambiante de la Montaña que tengo delante, veo las estrellas fugaces que pasan vivas, el tililar de las estrellas que van viajando lentamente por el firmamento... dormimos algo, nos acomodamos cada dos por tres buscando algo de comfort... y así hasta que a las 6 de la mañana, las luces de la Luna y los primeros rayos oblicuos de Sol nos permiten ver con suficiente claridad para preparar un desayuno frío y escaso: bebida isotónica de naranja, y galletas. Y a eso de las 7 comenzamos de nuevo a ascender pesadamente...

Dos horas después, estamos delante del corredor de la Moscowa. Paramos para hidratar, comer y untarnos de crema solar. Y enfilamos el corredor. Casi no hay nieve, la temperatura es de pleno desierto, y los crampones que arrastramos no nos van a servir. La ruta, en estas condiciones, es más dura, ya que el suelo descompuesto de tierra suelta y piedras nos hace sufrir en cada paso. Aunque llevamos protecciones, las botas, que nos cuecen literalmente los pies, están comenzando a llagarnos seriamente... Pero llegamos a la chimenea en una hora. El paso está catalogado de II+, y sí...tiene su qué... Pero no utilizamos cuerda. Con la cabeza fría y estudiando bien cada paso, llegamos a la arista... y ahi si que me impresiono bastante: aérea, cortada...vertiginosa.

Entomamos entonces la arista hacia la derecha (NE), y tras pasar varios dientes, comenzamos un pesado flanqueo...casi otra hora más. El Sol sigue castigando...El collado de lady lister se acerca.... Pero cuando llegamos a la cresta, el collado nos queda a unos 150m a la izquierda. Estamos en la falda del Cerbillona. La visión sobre el Glaciar y los Picos es un regalo que merece por supuesto el super esfuerzo que hemos hecho.Y nos sentimos felices...



Mercè se queda cuidando sus pies y preparando los últimos sandwichs. Yo paso por el Collado que me parece un lugar mágico...Imagino a Cazaux y Lady Lister sobrecogidos con las vistas del Glaciar...que entonces debía ser mucho más voluminoso e impresionante. Subo al Pico Central, tomo fotos, y bajo en unos minutos al lado de mi compañera. Tras almorzar, subimos al Cerbillona y en su cumbre descartamos subir el Clot de la Hount...Así que bajamos al Glaciar, y cramponeando nos acercamos a la base del Pique Longue.


Dejamos las mochilas y subimos grimpando a pelo...con una alegría inmensa porque entonces somos conscientes que esa Montaña soñada, hoy nos va a dejar subir, va a premiarnos con su cima en un dia que aunque tórrido, es claro y azul... Y sí. Unos minutos después estamos allá arriba...impresionante. Pero aquí no acaba la Montaña. Todos sabemos que hay que bajar... Y las dos horas hasta el Refugio -en el que vivaquearemos de nuevo pero en unas condiciones más aceptables y tras devorar unos spaghettis y un buen tazón de cacao con leche- se nos hacen algo largas...

Bajar,...bajar...bajar...las rodillas sufren...bajar...una grieta abierta...salto...bajar...bajar...piedras y más piedras...duelen las llagas...bajar...más piedras...

Una jornada agotadora que acaba a eso de las 16 hs. Tras diez horas de marcha, no damos para más.



Y el regreso al día siguiente hasta Bujaruelo, serán 6 hs inolvidables que dan para escribir un par de páginas más...la cabaña de Lourdes, la subida por el prado hasta el collado de Bernatuara...el lago que me habría bebido entero, la sed, el manantial que reaviva...


Vignemale por la Moscowa...una ruta que había soñado desde hacía muchos años, una Montaña que me llamó cuando subimos el Perdido...Porque a veces las Montañas llaman...pero ellas no tienen ninguna prisa en que tú las subas.




miércoles, 17 de agosto de 2011

Les Agudes (por Els Castellets)


Recién llegado de Andorra. Con dos días de estancia en la Gran ciudad he tenido más que suficiente...me siento como si nunca hubiese salido de la mancha Gris de Cemento y Asfalto... Navegando por la red, encuentro un mensaje de Mirlo que aparece como una revelación salvadora de almas:

" Voy a subir esta tarde Les Agudes por els Castellets, alguien se apunta?"...

Primero doy la excusa del coche: "es que...",  pero Ricard me tira por los suelos la coartada: " ya paso a buscarte!"...Mi respuesta no tarda: " Hecho!"

Y a eso de las 16.30 comenzamos a caminar. Salimos del párking de Les Ferreres, antes de llegar a St Marçal, en la carretera de Sta Fe del Montseny. Finalmente somos 4 "stressados"... Mirlo, Ricard, Damià y yo. Hay niebla. Los bosques se cubren del manto etéreo, la Montaña, más allá, todavía no se intuye... Hace mucha calor y sensación de humedad que nos pone a sudar a chorros...


Tardaremos una media hora o más en llegar -tras algún rodeo extra, jeje- al pie del primero de los Castellets. En definitiva es una Cresta de roca, aserrada, con varias puntas que hay que ir subiendo y bajando -por eso el nombre de los Castellets-. Los pasos no son excesivamente complicados (II como mucho?) pero la sensación aérea es importante en algunos momentos y hay que moverse con diligencia y eficacia... En invierno, según me han comentado, la cosa cambia mucho, y puedes encontrarte en dificultades según el hielo, la nieve, el viento, la meteo en general... Así que habrá que probar en invierno!!! :)



Y vamos progresando. Solo hay otro grupo de 4 con el que vamos coincidiendo a momentos. Por lo demás, cuando tu mano se agarra a la roca, tu vista busca la próxima presa, y tus pies te impulsan arriba...no hay más...Ya sabes...ese estado de felicidad absoluta, de serenidad... Y si además al levantar la vista entrevés otra roca, otro montículo, una montaña, entre los jirones de niebla que pasan navegando...la cosa toma un aire como dulzón...sabroso, casi dirìa que místico... Y una vez vuelves a tu consciencia, continúas progresando para volver a abandonar tus pensamientos al viento...ahora abajo...cuidado...ya está!...



A las dos horas entrevemos la cima de las Agudes que se nos abre en el cielo azul... Y en unos minutos, la última trepada nos pone en su cumbre. Allí, nos entrechocamos las manos, sonreímos, bebemos y comemos algo, charlamos, fotografio, colgamos la bandera del Club...esas cosas que se hacen en las cimas...por pequeñas y modestas que sean, hay unos rituales marcados que se repiten siempre, o casi siempre.



Tras un buen rato sobre las Nubes, comenzamos la bajada. En principio seguiremos el mismo cordal de rocas pero esta vez por el sendero "fácil", sin trepar ni destrepar Castillos... Y así -aunque hay un par de momentos en los que el sendero se pierde y nos tenemos que espabilar para encontrarlo- en un par de horas estamos en los coches con la excusa perfecta para tomar una bien merecida cerveza helada...y nos despedimos del Bosque Encantado, de la Montaña Humeante...con el ánimo ciertamente restaurado.










martes, 16 de agosto de 2011

ANDORREANDO.6. Envalira.


Habíamos quedado en hacer otra ruta...pero el día no era del todo claro y nuestras motivaciones también andaban torcidas... Al final, nos decantamos por un "paseo" asequible para los tres: Envalira. Desde el Port de Envalira, a más de 2200m de altura, se hace sencillo subir en poco más de una hora al Maià y al Ortafà. También es posible, tomando la dirección contraria, introducirse en las pistas de ski y subir al Pic Blanc de Envalira. Y una vez allí -pensé- si encuentro el momento siempre podré intentar subir al Negre de Envalira y ....jeje...siempre buscando opciones de escapada.

Nada más salir de "La Tanqueta", sin embargo, el comité de bienvenida de las Montañas nos hizo presuponer que la cosa iba a ser más complicada de lo que parecía: una masa de Niebla impresionante se levantaba desde la vertiente oriental y fluidamente iba y venía por los Collados y Cimas...ganando terreno a la visibilidad, enfriando a su paso las piedras, mojando con su aliento los pastos...

Montamos una sola mochila y nos pusimos a caminar por la pista que pasa o lleva directamente a la gran antena. Descartados el Maià y el Ortafà, que ya estaban totalmente cubiertos por la nube, el objetivo era el Blanc de Envalira, que por un momento pudimos contemplar:


Pudimos disfrutar durante un tiempo breve del Sol y las vistas del Circo de Pessons que tanto nos habían impresionado, de los Picos de Cubil, de los lagos... Pero a los pocos minutos, entramos de lleno en el "puré de patatas". A duras penas sabíamos por dónde andábamos ya que la visibilidad era muy reducida. El hecho de caminar por las pistas muy marcadas era una ventaja, aunque por mucho que pudiésemos ver nuestros pies en el camino, ese caminar casi a escondidas no era muy motivador. A dónde vamos?



El pequeño y yo reíamos. Le mostré de cuan poco sirve un frontal en la niebla:

- Ves?...encendemos la luz y la niebla se la traga!!!
- Anda!!!- exclamaba con su sonrisa picarona...

Anduvimos mareando la perdiz unos 45 minutos hasta llegar a un Bar de la estación, cerrado por supuesto y por desgracia ;)...jeeje. Había un cartel que indicaba que nos encontrábamos en el Coll Blanc a dos mil quinientos y pico de altura... La niebla ahora nos había empapado por completo los chubas y las zapatillas...se habian formado incluso algunos cristales de hielo en los cabellos... Decidimos esperar unos minutos. Aunque se intuía el camino de subida, no todo el equipo veía con buenos ojos seguirlo "a oscuras".



Y esperamos en aquel Bar, aquella instalación llena a rebosar de restos destrozados y basuras. Porque cuando la nieve se retira, quedan al descubierto los fragmentos de bastones, las botellas de agua, las latas de isotónicos, los envoltorios de galletas, los restos de una bota, un cinturón, las papeleras reventadas por una tormenta... Y silencio.

Por un momento la sensación de estar en una colonia marciana abandonada...en la sala de espera de algún puerto galáctico...(MOA)

Y como la cosa no abría, decidimos bajar. Y así, una de las montañas más sencillas que habíamos intentado, se salió con la suya sin problemas. Allí quedó, escondida en la Nube de Niebla.

Tendremos que volver a Andorra...por supuesto!

MAS FOTOS DE LAS 6 RUTAS?

jueves, 11 de agosto de 2011

ANDORREANDO. 5. Pessons-Montmalús




Buscamos el acceso a Grau Roig...esto de "explorar" territorios desconocidos tiene su qué. De repente aparece en el horizonte una cadena de Montañas que me atrapa por completo...No puedo evitarlo: un fuerte sentimiento se despierta en mi zona límbica, me enamoro de inmediato de esas gigantes rocosas que destacan contra el cielo de la mañana...

  • Te has pasado de largo!-escucho...veo una curva, hay espacio suficiente y aparco el coche.

Durante unos minutos el aire frío tras un dia entero de lluvias me sacude al tiempo que fotografío con ansiedad la imagen, como con miedo a perderla del recuerdo... Después, retorno al vehiculo y doy media vuelta. Diez minutos después, las mochilas están preparadas, y comienza el sonido rítmico de los bastones. El camino al principio discurre por una pista y después remonta un bosque frondoso subiendo hasta el Primer Lago.



Nuestro plan es encontrar desde el primer "Estany" el GR que nos llevará bordeando todo el conjunto central de los lagos hasta introducirnos en el formidable circo de Pessons. Corren rápidas las nubes, sopla muy fuerte el viento, pero el cielo parece que va a abrirse...y con él, la posibilidad que empieza a tomar cuerpo en mi mente... subo el Pessons?, lo intento?...

Pasado el Lago llamado Estany Primer, el del Bar, nos cuesta encontrar el camino. Nos encontramos con dos excursionistas, Tomás y Ferrán, que también andan desorientados... Tenemos que parar un momento, comentar la jugada, y desplegar el mapa orientándolo con ayuda de la brújula. Al final, nos decantamos por seguir las señales que ellos habían desestimado, y con la ayuda del Pequeño, que encuentra la señal del GR que cruza el río, conseguimos finalmente salir del embrollo de senderillos y enfilar hacia el siguiente lago por el camino correcto.


Iremos progresando lentamente, despacio. Los dos montañeros se adelantan, y yo intento no alejarme en exceso de mi familia, que sube poco a poco. Esto, nos permite saborear los lagos que van apareciendo, los perfiles de las Montañas que se van acercando, el reflejo de un cielo cada vez más azul sobre las aguas limpias y cristalinas estancadas en la alta montaña. En el Estany de les Fonts, el penúltimo de la serie, tomo una decisión que nace desde mis emociones, sin poder evitarlo:

  • Encendemos los walkies...voy a intentarlo. Cuando lleguéis al próximo lago es el último, allí podéis esperarme o ir bajando hacia el Bar...
  • Iremos bajando. En el Bar te esperamos.- genial...la respuesta que esperaba.

Y dicho esto, comienzo a saltar de roca en roca, a caminar al paso rápido y agitado del zorro, a soñar que va a ser posible si el dia evoluciona como parece... En diez minutos llego al último de los lagos en el que encuentro a los dos compañeros tomando fotos. Intercambiamos unas breves palabras, me desean suerte, y desaparezco entre las rocas que antaño arrastró un inmenso glaciar. El camino se me hace corto. El ritmo que impongo a mis piernas es acelerado pero firme. Llego a la base del collado y comienzo a ascender unos 150 m finales de desnivel muy pronunciado. Donde parecía imposible caminar, se abre un camino, cuando menos lo espero, el fuertísimo viento del W está a punto de tumbarme al coronar el collado, por un momento arece que mi bastón y mi cámara van a salir volando montaña abajo. La ilusión me bombardea...el pico de Pessons está ahí, y se va a dejar subir!!!... Subo casi corriendo el medio kilómetro que me separa de la cima. Y ahi estoy... con un panorama a mi alrededor que me encoge el alma...otra vez: decenas de lagos, cientos de picos, kilómetros y kilómetros de valles, laderas, cordilleras...y las nubes, lejos, afortunadamente MUY lejos.


Tomo unas fotos y decido comer algo y beber. Y de repente me cruza una idea por la mente. Despliego el mapa y compruebo que ciertamente, la distancia a recorrer si bajo por donde he venido va a ser la misma que si recorro la cresta en dirección E hasta llegar al Montmalús... Y no puedo resistirme. Y así se lo comunico por walkie a mi compañera.

Y serán dos horas largas al trote, asomándome a los abismos y canales que me recuerdan al Cadí, sintiendo el vértigo que llama desde el fondo del valle, compartiendo el vuelo en círculos del Buitre sobre mi cabeza, navegando por intuición con una Montaña Objetivo en el horizonte, pasando junto al Ribuls, que no me atrevo a subir por el viento y la pared rocosa que me invita burlona a desafiar la gravedad. Descenderé un paso donde parecía que iba a tener que desarrollar alas, retomaré el sendero que desde hace siglos han recorrido pastores, buhoneros, contrabandistas y montañeros... Y cuando llego a la cima del Montmalús, siento una felicidad interior que comparto con un pensamiento que lanzo al viento para tod@s los que estáis ahí, dentro de mí.




Y como un niño, bajo correteando hacia el Estany Primer, al que sólo tardaré 40 minutos en llegar.

  • Ha sido una experiencia increible!...voy a pedirme una cerveza para celebrarlo!...-digo...

Y devoro la mitad del bocadillo que había guardado por si las moscas...reteniendo las imágenes y sensaciones en mi mente para poder contarlas...para que tú las leas.

lunes, 8 de agosto de 2011

ANDORREANDO. 4. Valle de Sorteny.



El día amaneció con más nubes de las que serían de esperar en un mes de verano, pero en los Pirineos, esto no es tampoco algo demasiado extraño. Así que tras comprobar la meteo y chequear nuestras fuerzas, la decisión fue más fácil de tomar: hoy, un sencillo paseo de unas 3 o 4 hs, en principio...yo tenía muy claro que si llegábamos a la base del Estanyó, intentaría subirlo.

Nos dirigimos al Parc Natural de la Vall de Sorteny. Dejamos el coche en el Parking y comenzamos a caminar. Hacia el E vemos la figura del pic de l'Hortell i poco a poco según ganamos altura va apareciendo el afilado perfil del Arcalís, pico que subí ayer mismo. No son ni las 10 y el cielo ya se encuentra totalmente cubierto con nubes amenazadoras.

Recorremos los pequeños senderos que se salen de la pista ancha indicados con un símpolo de río-montaña... De esta forma, aunque son senderos "civilizados" disfrutamos de las sombras de la vegetación de ribera, del arrullo del Riu Sorteny que corre bravamente dando saltos entre las piedras redondeadas y de una riqueza de vida impresionante.

Hacia los 1900m de altura, ya en la pista principal y una vez dejado atrás un pequeño jardín botánico, nos encontramos con una barrera que franqueamos para continuar el camino (GRP). Unos minutos después nos encontramos el Refugio de Sorteny. 26 plazas en literas, un pequeño lavabo, chimenea, mesas y bancos, y mucho espacio... Fuera, una barbacoa, fuente... Un lugar magnífico. El cielo en estos momentos está tan oscuro que nuestro primer objetivo de subir al lago de l'Estanyó, queda descartado. Seria meterse quizás en un problema si al final se desata la tormenta. Mi intento en solitario al pico del mismo nombre, L'Estanyó, de 2915m, queda por supuesto totalmente descartado también...


 
Así que, tras valorar las opciones posibles, simplemente continuamos la ruta del GRP hacia el E y disfrutamos pausadamente de la gama de colores de las flores que nos rodean por todas partes. Seguramente, este valle es uno de los lugares más paradisíacos que he visitado en los Pirineos, por momentos, me recuerda a Ordesa y quizás me atrevería a decir que en ciertos aspectos supera al maravilloso valle Oscense: aquí la biodiversidad hace de las Montañas un verdadero vergel, un edén en toda regla.


 
Los últimos pinos negros ya crecen más dispersos y la formidable figura de La Serrera, otro gran pico de 2912m, se nos muestra impresionante a nuestra izquierda. Llegamos a los 2100 m, muy cerca del llamado Paso de la Serrera, cuando empiezan las primeras gotas...escuchamos los primeros truenos...vemos los primeros relámpagos. Hacemos una pausa y decidimos bajar al refugio... Y menos mal!...porque empieza a llover con fuerza y las pequeñas bolas de granizo que acompañan a los goterones de agua bailotean por todas partes...

El mejor restaurante del mundo. Eso es lo que nos parece el Refugio de Sorteny mientras damos buena cuenta de nuestro picnic. Al rato, parece que escampa, y decidimos aprovechar la tregua: bajamos rápidamente hacia el párquing. Pero, jajaja...continuaremos mojándonos durante todo el trayecto. Y lloverá toda la tarde, casi toda la noche...sin pausa.


 
Y escuchando el repiqueteo del agua, recuerdo la leyenda que Xavier, un guía que conducía a un grupo, nos contó en el refugio.

"Cuentan, que en tiempos de los Andosinos, las tribus iberas que vivían en estos parajes hace 2500 años, a mediados de Agosto, subían al Arcalís a encender una hoguera de grandes dimensiones justo cuando el SOL se veía en una grieta determinada de su cresta. Y entonces, todos los pueblos del Pirineo que podían ver la cima ardiente...sabían que había comenzado un nuevo año."

(Gracias Xavi)

viernes, 5 de agosto de 2011

ANDORREANDO. 3. Tristaina.



Hemos salido temprano, hacia las 8.45, del párking situado a unos 2220m. Remontamos hacia el NE en dirección a los lagos de Tristaina. En 20 minutos nos encontramos en el collado en el que aparece debajo nuestro el lago pequeño, l'estany primer, y hacia el N el lago medio, l'estany del mig. Aquí el camino se bifurca o trifurca o cuatrifurca... El Pico de Tristaina aparece como una aleta de tiburón en el horizonte. Se recorta sobre un cielo con altoestratos que indican que el tiempo hoy va a ser un buen aliado. Y aquí, tal y como habíamos quedado la noche anterior, nos dividimos. El equipo Alfa se dirigirá descendiendo primero y llaneando después, hacia el lago superior o Estany de més Amunt. Yo, tomaré el camino que circunvala el valle de los lagos.

Mi primera idea, en realidad, era subir al Port de Tristaina, para ganar la Carena y dirigirme al Costa Rodona y después al Pico de l'Estany Forcat. Pero mi objetivo principal es el Tristaina, que con sus 2876 m es el pico más alto de la zona. Y ensimismado por su belleza, por sus pendientes, por su forma...sigo el sendero sin hacer caso del desvío que indica el camino al Estany de Creussants...

Gano altura rápidamente y "navego" intuitivamente a unos 2500 m todo el rato. A mi derecha, veo los lagos más abajo y en algunos momentos al equipo Alfa en los senderos. Nos vamos comunicando con cierta regularidad por Walkie y todo va a las mil maravillas. Hasta que llego a algunos roquedales, posiblemente fruto de la descomposición de las mismas Montañas, en los que seguir el punto amarillo que indica el camino se hace algo complicado... Con mucho tacto cruzo uno, dos, tres, cuatro de estas enormes zonas del caos...y ya el Tristaina se ve cerca... Sin embargo, no he encontrado el desvío hacia el Port de tristaina que debe haber quedado atrás...quizás por allí donde pastaban las cabras de redondeados cuernos?... Es igual. El objetivo está claro, la Montaña que me llama es ESA que tengo delante...Pero...había camino hasta su cima?...

Ni siquiero saco el mapa. Recuerdo que tengo que ganar la cresta y seguirla hasta la cima. Así que cuando llega el momento en el que el sendero parece perderse en la nada, no desespero. No todavía.
Comienzo a subir en diagonal por un terreno en el que si bien no hay marcas de pintura, alguna fita o mojón si que veo de tanto en tanto. Pero esto no dura mucho tiempo. Estoy a unos 2600 m de altura cuando me veo peleando en unas pendientes pronunciadas que caen hacia el S. Seguramente, una caída me llevaría casi directo al Lago. La cresta me resulta lejana, y el pico parece reirse, ponerme a prueba... "quieres subir?".... Hay un momento en el que dudo...a punto estoy de abortar, pero recordando el sabor de boca que luego queda, mi mente elabora un pensamiento que contrarresta: y lo bien que te vas a sentir cuando llegues arriba?...arriba pues!!!. Busco un paso que no existe... quizás esto sólo son senderillos de cabras, a juzgar por las cagadas que encuentro... Y me alegro. Si pasaron las cabras, puedo pasar yo también...no?...

No hay nadie. No he visto a ninguna otra persona. Por el walkie me avisan que "comienza a llegar gente a los lagos, y que se dirigen hacia el W...hacia lo que debe ser la ruta normal...pienso. Pero yo estoy aquí. Y no hay más. Bordeo un par de farallones rocosos con sumo cuidado...casi no he ganado altura, 2650?... Y aparece ante mí una canal. Si subo directo... Empiezo a trepar. Primero son pasos algo complicados, pero tengo confianza plena. Luego se alternan momentos de canchal descompuesto con pasos mucho más sencillos. La canal por momentos se ensancha. Paso junto a una amplia zona de piedra plana que me servirá de referencia para calcular la ruta o encontrar la bajada si tengo que volver por aquí...que espero que no!!!. 2730... Falta muy poco...el viento empieza a soplar...sé que la cresta se acerca... y achucho al máximo a mis piernas y brazos...y a mi mente.

Y de repente estoy en la cresta. Cortada. Aérea... Me ofrece la visión del Lago o Estany Forcat, azul como una mancha de lapislázuli que cubre el valle, al lado hay otro...el lago de Ossada...también de un azul puro que parece un cielo...siento una felicidad que me revienta...

Son cerca de las 11. Estoy a 2800 metros de altura... y la cresta afilada que me espera me invita a progresar en dirección E, el vuelo de un Aguila me recuerda que todavía no he bebido ni comido nada. Mi cuerpo envía señales: hay que beber y comer algo...me siento incluso algo mareado... Y no debe ser por la altura...quizás el esfuerzo, quizás el haberme sentido tan SOLO en uno de esos lugares en los que siempre es mejor estar acompañado. Y al fin, llego a una gran torre de piedras en la que ondean las banderolas de oración budistas...


 
Om Mane Padme Hum...Om Mane Padme Hum... lo repito incesantemente...llego, toco la banderola de color amarillo...observo los lagos...Me empuja el viento...Veo encima mío a unos metros más allá la verdadera cima... Aquí parte un sendero marcado con puntos amarillos hacia el valle -esta es la bajada!! o la subida!!- y contento, enfilo los últimos tramos hasta llegar a la verdadera cumbre en la que, por fin, bebo agua pura y devoro un plátano y unas galletas de chocolate... Aviso por Walkie, tomo unas fotos, grabo un video que un día podré compartir con amig@s y familiares...y comienzo el descenso.



El descenso no será demasiado complicado ni tampoco fácil. En realidad, hay Montañas que NO son fáciles... Y para mí, el Tristaina, ha sido una de ellas. Comienzo a encontrar gente que sube... dos, dos más, tres, uno... Y en una hora me encuentro en el lago con el grupo Alfa... Y sin pensarlo, mi espíritu de Trucha me pide el baño que me prometí a mí mismo en la cima...Son las 12:45.

Y me recargo en las puras y heladas aguas azules en las que se reflejan las Gigantes de Piedra recortadas en el cielo.


 

miércoles, 3 de agosto de 2011

ANDORREANDO.2. Arcalís y Cataperdís.



El túnel de Port de Rat, incabado, observa desde sus entrañas como preparamos unas ligeras mochilas de "intento". Cada cual lleva la suya, incluido el Pequeño. Son las 9 cuando comenzamos a caminar sin prisas, siguiendo las marcas amarillas que nos conducirán al Cataperdís.

Al principio vamos bien, pero en el camino comienzan los entretenimientos: que si una rana, que si quiero coger ranas, que por qué no puedo coger ranas, que niño, las ranas están ahí para que las podamos disfrutar, pero mejor las dejamos donde están y les sacamos una foto...y al final coge una rana...claro.



Creo que ese momento nos distrae y nos desviamos a la izquierda, hacia el SE... De todas formas, las pistas de esquí ahora vacías de nieve y gente, no van a dejar que nos perdamos en exceso pese a no llevar ni GPS, ni tan siquiera haber mirado el Mapa... De nuevo por intuición...

Al llegar a la estación del Telesilla del sector Arcalís, reencontramos las marcas amarillas que enfilan hacia el collado que tenemos a unos 200 m por encima nuestro. Y hacia allá que nos vamos, aunque yo comienzo a mirar cada vez más hacia el W... creo que aquel picacho es el Cataperdís...entonces este que me queda al E...?

Cuando llegamos al collado, Gemma decide que ha tenido bastante por el momento... Al ver la afilada cresta rocosa que nos separa de la cima, toma la sabia decisión de abrigarse, sentarse cómodamente y quedarse con el Pequeño a disfrutar de las vistas saboreando unos plátanos...

Yo enfilo la cresta con el corazón bombeando de emoción intensa. Algún paso es complicadillo y tiene un patio considerable, pero en realidad es sencilla...aérea pero sencilla. No paro a hacer fotos y sigo hasta la cumbre que me deleita con unas vistas increibles sobre el Tristaina y sus Lagos... En la otra vertiente más lagos: los de Angonella... Y alrededor, tantas montañas que no cabría ahora enumerarlas... Suena el Walkie:

  • dónde andas?
  • Acabo de hacer cima...hago dos fotos y vengo... todo bien?
  • Bien bien...
Creo que re-cresteo de regreso cambiando algunos pasos... Cuando llego al collado, observamos el Mapa, y entonces comprendo: he subido el Arcalís...así que aquella que me llama desde mi izquierda, es el Cataperdís... Y para allá que nos vamos.




Pasamos una cima secundaria sin nombre -ni altura, porque mi altímetro no está bien calibrado y la lectura no es fiable por unos 40m- y descendemos hacia la Brecha de Arcalís. Allí hay un sendero bien marcado que baja directo hacia el valle y el Túnel... De nuevo nos separamos... Mientras ellos empiezan el descenso, yo enfilo la sencilla cresta y subo en unos minutos hasta el Cataperdís... Y el momento vale la pena: una manada de Montañas navega sobre un mar de Nubes... reconozco la Pica d'Estats...afilada y con algún nevero todavía... y como siempre, disfruto la sensación, pienso en tod@s l@s que están conmigo aunque no lo sepan, y llamo por walkie:



  • Cima!
  • Sí...te vemos – unas figuras en el camino me saludan con los brazos varios cientos de metros más abajo...
  • Hago unas fotos y bajo... todo bien?
  • Bien bien... nos cogerás antes de llegar al coche...al paso que vas!

Y sí. Llegaremos juntos al coche... Y antes que las infladas nubes dejen su regalo de tarde sobre los valles, regresamos al campo base... Comeremos caliente y nos daremos una ducha que será otro regalo de esta maravillosa vida...aunque te pierdas...las Montañas Aman.


martes, 2 de agosto de 2011

ANDORREANDO. 1. Camino del Hierro.


Pero...esto no es Egipto...verdad?, ni tampoco suenan los Alan Parson's Project... Sólo el sonido del viento y el arrullo del río Valira ocupan mis oídos...

Andorra. Un país...entre Montañas. El País de los Pirineos.

Hemos llegado justo para la hora de comer. Si el viaje ha sido rápido, atravesar la aduana -ya que Andorra no pertenece a la Unión Europea y hay Aduana- y posteriormente St Julià de Lòria y Andorra la Vella NO lo ha sido tanto...Un horror... No creo que vuelva hasta que salga de aquí. Pero claro, entiendo que hay quien disfruta de estas mini-urbes, de los supermecados a rebosar de productos "más baratos que en Andorra"... pero yo no.

Llorts. Ni siquiera le daria la categoría de pueblo. Hay menos de dos docenas de edificaciones. Y encima, nos hemos quedado antes de llegar al "centro"... así que estamos entre Robles y Abedules, acompañados por el vuelo de los aviones roqueros (un pájaro, parecido a nuestros aviones negros y blancos pero de color marrón claro)....

Hemos hecho acopio de provisiones en La Massana. La verdad es que muchas más opciones no teníamos... Pero tras una hora de compra en un supermercado, hemos avituallado la expedición para toda una semana.

Y después, aprovechando que el viento nos llamaba, hemos salido a dar una vuelta... SIn mapa, sin GPS, sin brújula, sin más que la sorpresa del que descubre algo que no conoce.


Al cruzar el puente una telaraña  me avisa: ATRAP-ARTE!... pero la araña ha volado, y no he podido comprender mucho más del mensaje ... Y así, hemos aprovechado para estirar las entumecidas extremidades ... Un cartel nos indica que a 700 m tenemos las minas de Llorts... Minas?

Hemos disfrutado en silencio del camino empedrado en el que cada pocos metros aparecían esculturas diversas realizadas por personajes del mundo del arte de diversos puntos del planeta... Un museo al aire libre, en cierta forma en homenaje a la industria del hierro que dió vida -económicamente hablando- a este valle cerrado entre picachos perdido en los confines de las montañas del fuego y la nieve -Piri-Neos-



Sin embargo, pese al empeño de los monolitos de piedra, el puente con los muñecos de hierro, el pico con carro de acero, la mancha de hierro, los "Moais" de las 7 culturas... mi mente se ha refrescado con el orégano en flor, los helechos, las cortezas de los abedules, las lobuladas hojas de los Robles, las milenramas, las fresas enfrutadas, las moras, los llantenes, los bojes, los avellanos, los Alisos... Por todos los dioses!...que riqueza de vida que me engulle!!




 Cada vez que intentaba valorar el ARTE... la Madre Tierra contrarrestaba con una imagen de corteza, de piedra, de baya, de flor, de insecto, de juego de luces y sombras de las nubes corredoras de cielos... Y sí... Tengo que reconocer que me ha ATRAPADO...

Mañana más... y esta vez, espero, será en algún Lago, alguna cumbre, algún Bosque perdido... será AHÍ donde me encuentre de nuevo conmigo mismo y con la Belleza.

Y al final del camino que hemos recorrido hacia arriba y ahacia abajo... tras unas horas de ANDURREO... Las minas. Unas figuras fantasmales envueltas en plástico se introducen en la Tierra de la mano de un guía... Quizás probemos...si sobra el tiempo. Porque este país, según parece...promete!