Soy un Nómada. Mis únicas Banderas son el cielo del día y el manto de estrellas en la noche. Mi Tierra está allí donde piso. Mi cultura es la que comparto e intercambio con las personas que encuentro en el camino. Mi himno es el canto de los pájaros, el susurro de los arroyos cristalinos y el bufido del viento en bosques y cumbres. Mi gente sois tod@s, aunque todavía no os conozca.

jueves, 11 de agosto de 2011

ANDORREANDO. 5. Pessons-Montmalús




Buscamos el acceso a Grau Roig...esto de "explorar" territorios desconocidos tiene su qué. De repente aparece en el horizonte una cadena de Montañas que me atrapa por completo...No puedo evitarlo: un fuerte sentimiento se despierta en mi zona límbica, me enamoro de inmediato de esas gigantes rocosas que destacan contra el cielo de la mañana...

  • Te has pasado de largo!-escucho...veo una curva, hay espacio suficiente y aparco el coche.

Durante unos minutos el aire frío tras un dia entero de lluvias me sacude al tiempo que fotografío con ansiedad la imagen, como con miedo a perderla del recuerdo... Después, retorno al vehiculo y doy media vuelta. Diez minutos después, las mochilas están preparadas, y comienza el sonido rítmico de los bastones. El camino al principio discurre por una pista y después remonta un bosque frondoso subiendo hasta el Primer Lago.



Nuestro plan es encontrar desde el primer "Estany" el GR que nos llevará bordeando todo el conjunto central de los lagos hasta introducirnos en el formidable circo de Pessons. Corren rápidas las nubes, sopla muy fuerte el viento, pero el cielo parece que va a abrirse...y con él, la posibilidad que empieza a tomar cuerpo en mi mente... subo el Pessons?, lo intento?...

Pasado el Lago llamado Estany Primer, el del Bar, nos cuesta encontrar el camino. Nos encontramos con dos excursionistas, Tomás y Ferrán, que también andan desorientados... Tenemos que parar un momento, comentar la jugada, y desplegar el mapa orientándolo con ayuda de la brújula. Al final, nos decantamos por seguir las señales que ellos habían desestimado, y con la ayuda del Pequeño, que encuentra la señal del GR que cruza el río, conseguimos finalmente salir del embrollo de senderillos y enfilar hacia el siguiente lago por el camino correcto.


Iremos progresando lentamente, despacio. Los dos montañeros se adelantan, y yo intento no alejarme en exceso de mi familia, que sube poco a poco. Esto, nos permite saborear los lagos que van apareciendo, los perfiles de las Montañas que se van acercando, el reflejo de un cielo cada vez más azul sobre las aguas limpias y cristalinas estancadas en la alta montaña. En el Estany de les Fonts, el penúltimo de la serie, tomo una decisión que nace desde mis emociones, sin poder evitarlo:

  • Encendemos los walkies...voy a intentarlo. Cuando lleguéis al próximo lago es el último, allí podéis esperarme o ir bajando hacia el Bar...
  • Iremos bajando. En el Bar te esperamos.- genial...la respuesta que esperaba.

Y dicho esto, comienzo a saltar de roca en roca, a caminar al paso rápido y agitado del zorro, a soñar que va a ser posible si el dia evoluciona como parece... En diez minutos llego al último de los lagos en el que encuentro a los dos compañeros tomando fotos. Intercambiamos unas breves palabras, me desean suerte, y desaparezco entre las rocas que antaño arrastró un inmenso glaciar. El camino se me hace corto. El ritmo que impongo a mis piernas es acelerado pero firme. Llego a la base del collado y comienzo a ascender unos 150 m finales de desnivel muy pronunciado. Donde parecía imposible caminar, se abre un camino, cuando menos lo espero, el fuertísimo viento del W está a punto de tumbarme al coronar el collado, por un momento arece que mi bastón y mi cámara van a salir volando montaña abajo. La ilusión me bombardea...el pico de Pessons está ahí, y se va a dejar subir!!!... Subo casi corriendo el medio kilómetro que me separa de la cima. Y ahi estoy... con un panorama a mi alrededor que me encoge el alma...otra vez: decenas de lagos, cientos de picos, kilómetros y kilómetros de valles, laderas, cordilleras...y las nubes, lejos, afortunadamente MUY lejos.


Tomo unas fotos y decido comer algo y beber. Y de repente me cruza una idea por la mente. Despliego el mapa y compruebo que ciertamente, la distancia a recorrer si bajo por donde he venido va a ser la misma que si recorro la cresta en dirección E hasta llegar al Montmalús... Y no puedo resistirme. Y así se lo comunico por walkie a mi compañera.

Y serán dos horas largas al trote, asomándome a los abismos y canales que me recuerdan al Cadí, sintiendo el vértigo que llama desde el fondo del valle, compartiendo el vuelo en círculos del Buitre sobre mi cabeza, navegando por intuición con una Montaña Objetivo en el horizonte, pasando junto al Ribuls, que no me atrevo a subir por el viento y la pared rocosa que me invita burlona a desafiar la gravedad. Descenderé un paso donde parecía que iba a tener que desarrollar alas, retomaré el sendero que desde hace siglos han recorrido pastores, buhoneros, contrabandistas y montañeros... Y cuando llego a la cima del Montmalús, siento una felicidad interior que comparto con un pensamiento que lanzo al viento para tod@s los que estáis ahí, dentro de mí.




Y como un niño, bajo correteando hacia el Estany Primer, al que sólo tardaré 40 minutos en llegar.

  • Ha sido una experiencia increible!...voy a pedirme una cerveza para celebrarlo!...-digo...

Y devoro la mitad del bocadillo que había guardado por si las moscas...reteniendo las imágenes y sensaciones en mi mente para poder contarlas...para que tú las leas.