Soy un Nómada. Mis únicas Banderas son el cielo del día y el manto de estrellas en la noche. Mi Tierra está allí donde piso. Mi cultura es la que comparto e intercambio con las personas que encuentro en el camino. Mi himno es el canto de los pájaros, el susurro de los arroyos cristalinos y el bufido del viento en bosques y cumbres. Mi gente sois tod@s, aunque todavía no os conozca.

viernes, 5 de agosto de 2011

ANDORREANDO. 3. Tristaina.



Hemos salido temprano, hacia las 8.45, del párking situado a unos 2220m. Remontamos hacia el NE en dirección a los lagos de Tristaina. En 20 minutos nos encontramos en el collado en el que aparece debajo nuestro el lago pequeño, l'estany primer, y hacia el N el lago medio, l'estany del mig. Aquí el camino se bifurca o trifurca o cuatrifurca... El Pico de Tristaina aparece como una aleta de tiburón en el horizonte. Se recorta sobre un cielo con altoestratos que indican que el tiempo hoy va a ser un buen aliado. Y aquí, tal y como habíamos quedado la noche anterior, nos dividimos. El equipo Alfa se dirigirá descendiendo primero y llaneando después, hacia el lago superior o Estany de més Amunt. Yo, tomaré el camino que circunvala el valle de los lagos.

Mi primera idea, en realidad, era subir al Port de Tristaina, para ganar la Carena y dirigirme al Costa Rodona y después al Pico de l'Estany Forcat. Pero mi objetivo principal es el Tristaina, que con sus 2876 m es el pico más alto de la zona. Y ensimismado por su belleza, por sus pendientes, por su forma...sigo el sendero sin hacer caso del desvío que indica el camino al Estany de Creussants...

Gano altura rápidamente y "navego" intuitivamente a unos 2500 m todo el rato. A mi derecha, veo los lagos más abajo y en algunos momentos al equipo Alfa en los senderos. Nos vamos comunicando con cierta regularidad por Walkie y todo va a las mil maravillas. Hasta que llego a algunos roquedales, posiblemente fruto de la descomposición de las mismas Montañas, en los que seguir el punto amarillo que indica el camino se hace algo complicado... Con mucho tacto cruzo uno, dos, tres, cuatro de estas enormes zonas del caos...y ya el Tristaina se ve cerca... Sin embargo, no he encontrado el desvío hacia el Port de tristaina que debe haber quedado atrás...quizás por allí donde pastaban las cabras de redondeados cuernos?... Es igual. El objetivo está claro, la Montaña que me llama es ESA que tengo delante...Pero...había camino hasta su cima?...

Ni siquiero saco el mapa. Recuerdo que tengo que ganar la cresta y seguirla hasta la cima. Así que cuando llega el momento en el que el sendero parece perderse en la nada, no desespero. No todavía.
Comienzo a subir en diagonal por un terreno en el que si bien no hay marcas de pintura, alguna fita o mojón si que veo de tanto en tanto. Pero esto no dura mucho tiempo. Estoy a unos 2600 m de altura cuando me veo peleando en unas pendientes pronunciadas que caen hacia el S. Seguramente, una caída me llevaría casi directo al Lago. La cresta me resulta lejana, y el pico parece reirse, ponerme a prueba... "quieres subir?".... Hay un momento en el que dudo...a punto estoy de abortar, pero recordando el sabor de boca que luego queda, mi mente elabora un pensamiento que contrarresta: y lo bien que te vas a sentir cuando llegues arriba?...arriba pues!!!. Busco un paso que no existe... quizás esto sólo son senderillos de cabras, a juzgar por las cagadas que encuentro... Y me alegro. Si pasaron las cabras, puedo pasar yo también...no?...

No hay nadie. No he visto a ninguna otra persona. Por el walkie me avisan que "comienza a llegar gente a los lagos, y que se dirigen hacia el W...hacia lo que debe ser la ruta normal...pienso. Pero yo estoy aquí. Y no hay más. Bordeo un par de farallones rocosos con sumo cuidado...casi no he ganado altura, 2650?... Y aparece ante mí una canal. Si subo directo... Empiezo a trepar. Primero son pasos algo complicados, pero tengo confianza plena. Luego se alternan momentos de canchal descompuesto con pasos mucho más sencillos. La canal por momentos se ensancha. Paso junto a una amplia zona de piedra plana que me servirá de referencia para calcular la ruta o encontrar la bajada si tengo que volver por aquí...que espero que no!!!. 2730... Falta muy poco...el viento empieza a soplar...sé que la cresta se acerca... y achucho al máximo a mis piernas y brazos...y a mi mente.

Y de repente estoy en la cresta. Cortada. Aérea... Me ofrece la visión del Lago o Estany Forcat, azul como una mancha de lapislázuli que cubre el valle, al lado hay otro...el lago de Ossada...también de un azul puro que parece un cielo...siento una felicidad que me revienta...

Son cerca de las 11. Estoy a 2800 metros de altura... y la cresta afilada que me espera me invita a progresar en dirección E, el vuelo de un Aguila me recuerda que todavía no he bebido ni comido nada. Mi cuerpo envía señales: hay que beber y comer algo...me siento incluso algo mareado... Y no debe ser por la altura...quizás el esfuerzo, quizás el haberme sentido tan SOLO en uno de esos lugares en los que siempre es mejor estar acompañado. Y al fin, llego a una gran torre de piedras en la que ondean las banderolas de oración budistas...


 
Om Mane Padme Hum...Om Mane Padme Hum... lo repito incesantemente...llego, toco la banderola de color amarillo...observo los lagos...Me empuja el viento...Veo encima mío a unos metros más allá la verdadera cima... Aquí parte un sendero marcado con puntos amarillos hacia el valle -esta es la bajada!! o la subida!!- y contento, enfilo los últimos tramos hasta llegar a la verdadera cumbre en la que, por fin, bebo agua pura y devoro un plátano y unas galletas de chocolate... Aviso por Walkie, tomo unas fotos, grabo un video que un día podré compartir con amig@s y familiares...y comienzo el descenso.



El descenso no será demasiado complicado ni tampoco fácil. En realidad, hay Montañas que NO son fáciles... Y para mí, el Tristaina, ha sido una de ellas. Comienzo a encontrar gente que sube... dos, dos más, tres, uno... Y en una hora me encuentro en el lago con el grupo Alfa... Y sin pensarlo, mi espíritu de Trucha me pide el baño que me prometí a mí mismo en la cima...Son las 12:45.

Y me recargo en las puras y heladas aguas azules en las que se reflejan las Gigantes de Piedra recortadas en el cielo.